Incluye en tu dieta alimentos ricos en Potasio:
Tomate, naranja, plátano, verduras, especialmente todas aquellas de hoja verde. También se encuentra presente de manera abundante en los dátiles, las ciruelas pasas y el melón, así como en frutos secos como las nueces, avellanas y el cacao del cual se obtiene el chocolate).
El consumo de Potasio ayuda a controlar la tensión arterial, y a eliminar parte del Sodio del organismo. Un exceso de sodio puede tener consecuencias negativas para la salud como la hipertensión, o problemas de tipo cardiovascular.
El Potasio es vital para que trabajen nuestros músculos y se mantengan sanos, y esta implicado en la reacción de los nervios ante los diferentes estímulos.
Otras funciones del Potasio son:
- Ayuda a que los desechos orgánicos sean eliminados.
- Contribuye a la normalización del ritmo cardiaco.
- Es necesario para el crecimiento del organismo.
- Regula el equilibrio de agua y el balance del ácido base en los tejidos, y en la sangre. Contribuye a la eliminación de líquidos.
- Estimula el movimiento intestinal.
- Facilita el transporte de oxígeno al cerebro.
Evita un consumo excesivo de sal
La sal añadida a las comidas debería ser un máximo de 1 o 2 gramos diarios. (2 gramos equivalen a una cucharilla de té).
Pero no solo ahí que tener cuidado con la sal que ponemos al cocinar, ya que muchos alimentos como las aceitunas, el pescado, los maricos e incluso verduras y frutas, entre otros contienen sal. También comidas industrializadas como las galletas, los embutidos, las sopas en sobre, la comida rápida, las frituras, entre otras, contienen alta cantidad de sal.
Toda persona que no quiera tener problemas de presión arterial alta debe disminuir su consumo de sal, realizar más actividad física, evitar el tabaco y el alcohol, comer frutas y verduras, y hacerse un chequeo preventivo anual.
La mayoría de los estudios científicos muestran que la reducción del consumo de sal reduce la presión arterial, siendo este efecto más pronunciado en las personas hipertensas, las personas obesas y los ancianos.
Sustituye la sal por especias y condimentos que ayuden a potenciar el sabor de las comidas: cebollas, ajos, pimienta, orégano, pimentón, albahaca, romero, tomillo, curry, limón, vinagre….
Procura consumir por lo menos dos veces a la semana pescado azul
Atún, sardinas, boquerones, salmón, arenque, anchoas, por su contenido en Acidos grasos Omega 3, que mejoran el control de la presión arterial.